Un taller de repostería llega a Bejucal, esa singular localidad de la provincia de Mayabeque, --cuna de las celebres parrandas--- para multiplicar los saberes del arte de endulzar la vida, esta vez llega con la presencia del afamado chef Jorge Luis Bello, invitado especialmente para la ocasión.

A este intercambio que durará 1 semana asisten estudiantes del Instituto Politécnico Protesta de Baragua en la especialidad de elaboración de alimentos, junto a varios asociados de la culinaria de ese territorio y trtabajadores de la gastronomìa local.

El programa concebido para este taller permitirá adquirir habilidades en la elaboración de diversos postres tradicionales, pero también la forma de adornar esos productos, las que con otros entrenamientos y cursos podrán diversificarse.

Bello con un amplia experiencia en la docencia y en entrenar a futuros profesionales, les lleva el claro mensaje de la utilización de productos naturales en la producción de cualquier dulce o de la más fina repostería, toda vez que la Isla es rica en su herencia dulcera. Él lo dice convencido de que los postres de la abuelita tienen un lugar en la cocina criolla: “La calabaza se vuelve pudín de pan, el coco se hace flan, los huevos producen una gloria conocida como tocinillo del cielo y la fruta-bomba se come en espeso almíbar. Las torrejas, hechas a partir del típico Pan de Flauta, esponjosas y fritas en aceite, llegan a la mesa nadando en un almíbar aderezado con canela".

En hora buena este taller de Bello.